GIFSoup Toy Story es una película estadounidense de animación por computadora dirigida por John Lasseter y estrenada en 1995. Se convirtió en el primer largometraje de los estudios Pixar.[3] Además, cabe señalarse que fue coproducida por Ralph Guggenheim y Bonnie Arnold, y distribuida por Walt Disney Pictures a través de Buena Vista International. El guión fue escrito por Joss Whedon, Andrew Stanton, Joel Cohen y Alec Sokolow, contando con la musicalización de Randy Newman. El reparto principal estuvo integrado por Tom Hanks y Tim Allen, quienes prestaron sus voces en inglés a los personajes de Woody y Buzz, respectivamente. En cuanto a las voces en español de los protagonistas, en Hispanoamérica, Carlos Segundo y José Luis Orozco se encargaron de dichos roles;[4] a su vez, Óscar Barberán y José Luis Gil hicieron lo propio en España.[4] Para el proceso de animación, colaboraron un total de 110 empleados de Pixar,[5] a diferencia de los 800 que trabajaron en una de las últimas producciones de Disney en aquellos años, El rey león, estrenada a mediados de 1994.[6] La historia sigue las aventuras de un grupo de juguetes vivientes, específicamente del vaquero Woody y el guardián espacial Buzz Lightyear, quienes al principio rivalizan, pero conforme transcurre la trama se van volviendo cada vez más amigos. Tras su estreno, Toy Story pasó a ser la cinta más taquillera en su primer fin de semana de exhibición,[1] logrando recaudar más de 191 millones de dólares en Estados Unidos y Canadá, así como más de 361 millones adicionales a nivel internacional.[2] De igual manera, se hizo acreedora a críticas en su gran mayoría positivas que elogiaron la innovación técnica de la animación, así como la inteligencia y complejidad del guión.[7] [8] Además de lanzamientos en DVD, los productos inspirados en la película van desde juguetes hasta videojuegos, series derivadas y merchandising de todo tipo. Debido a su enorme éxito tanto en recaudación como en críticas, Pixar decidió producir una continuación, que una vez estrenada arrasó inclusive con las cifras logradas en taquilla por su predecesora. El 2 de octubre de 2009 se reestrenaron Toy Story y Toy Story 2 en formato Disney Digital 3D. El 18 de junio de 2010 se estrenó Toy Story 3.[9]
En las escenas iniciales, el muñeco vaquero Woody coordina una misión de reconocimiento en torno a la fiesta de cumpleaños de Andy, su dueño, días antes de que la familia de este se mude a una nueva casa. Para consternación de Woody, el niño recibe una nueva figura de acción, el astronauta Buzz Lightyear, cuyas características innovadoras pronto lo habrían de convertir en su nuevo juguete favorito, reemplazando así al vaquero anticuado. Sin embargo, un confundido Buzz no se percata de que, en realidad, él también es un juguete, pues piensa que es un guardian espacial y, por lo tanto, ve a Woody como un obstáculo en la «misión» de regresar a su planeta de origen. No transcurre mucho tiempo para que Woody intente deshacerse de Buzz, el problema que tiene Woody con Buzz es que Buzz esta acaparando el sitio de Andy que antes había acaparado Woody: en su primer intento, lo empuja hacia un hueco detrás del escritorio de Andy pero, al final, falla y su adversario cae por la ventana. Conscientes de ello, los demás juguetes acusan a Woody de intentar asesinar a Buzz debido a que le tiene celos; no obstante, cuando van a reprenderlo, llega Andy y se lo lleva consigo, pues en ese momento va a partir rumbo al restaurante Pizza Planet. En el proceso, Buzz observa como Andy parte junto con Woody en la camioneta familiar y decide subir al vehículo para encararlo por lo sucedido. Cuando la madre del niño hace una parada en una gasolinera para reabastecer el tanque de combustible y mientras el vaquero está pensando en cómo regresaría a la casa a enfrentarse a los demás juguetes, aparece Buzz repentinamente y ambos pelean en el lugar; al final, son abandonados accidentalmente por Andy. Para reunirse con Andy en el restaurante, el sheriff planea abordar un camión que se dirige hacia ese lugar; sin embargo, se da cuenta de que si regresa solo, los otros juguetes lo castigarían. Para evitarlo, Woody convence a Buzz de que dicho camión los llevaría a una nave espacial con la que el astronauta podría volver a su hogar. Tras abordarlo y llegar a Pizza Planet, Buzz se dirige hacia una máquina atrapa-peluches con forma de nave, pensando que es lo que le había prometido el vaquero. Pero, al percatarse de esto, Woody intenta rescatarlo quedando atrapado junto con él en el interior de la máquina. Más tarde, son extraídos por Sid Phillips, el vecino de Andy conocido por su rudeza y por ser un destructor de juguetes. El día anterior a la mudanza de Andy y su familia, Woody y Buzz buscan la forma de escapar de la extraña habitación de Sid, donde se topan con los espeluznantes juguetes que el joven ha alterado y destruido a lo largo de los años. En ese instante, Buzz observa un anuncio de televisión de otros juguetes de Buzz Lightyear, percatándose de que él también es un juguete. Decaído ante dicha revelación, Buzz intenta desesperadamente una última oportunidad de volar por la ventana, pero cae y se rompe, literalmente, el brazo. Woody es incapaz de animarlo para que participe en su plan de escape, incluso cuando los juguetes de Sid muestran sus verdaderas personalidades y le reparan el brazo al muñeco astronauta. Mientras tanto, el niño se prepara para destruir a Buzz atándolo a un cohete de fuegos artificiales, pero tal preparación se retrasa debido a una tormenta. Finalmente, el sheriff logra convencer a Buzz de que la vida vale solamente experimentándola, aun cuando él no sea un héroe espacial, pero en el proceso pierde la esperanza de que él mismo vaya a tener posibilidad alguna de ser el favorito de Andy. Ante este episodio conflictivo, Buzz logra reanimarlo, pero Sid despierta antes de que escapen y se lleva a Buzz (aún atado al cohete), a su plataforma de lanzamiento en el patio trasero de su casa. Con la colaboración de los juguetes de Sid, Woody organiza el rescate de Buzz y aterroriza a Sid, quien huye del lugar ante el temor de sus propios juguetes. Sin embargo, sus esfuerzos son infructuosos, pues pierden el coche de Andy mientras éste es conducido hacia la nueva casa familiar. Para entrar al camión en movimiento, Buzz decide sacrificarse con el motivo de salvar a Woody; una vez en el interior del vehículo, el muñeco vaquero intenta rescatar a su amigo con el automóvil a control remoto de Andy. Los otros juguetes que se encuentran en el camión de mudanzas creen erróneamente que Woody intenta librarse de otro juguete, por lo que lo tiran a la carretera junto con Buzz. Más tarde, se percatan de que el astronauta se encuentra con él a bordo del automóvil y tratan de ayudarlos a subir al camión, pero las baterías del automóvil se agotan, por lo que Woody y Buzz se quedan atrás. El primero entonces se da cuenta de que puede encender el cohete de Sid que está en la espalda de Buzz y logra lanzar el automóvil hacia el camión de mudanzas, haciendo que Woody y Buzz se eleven en el aire. Al final Buzz logra liberarse del cohete, y Woody y él se deslizan por el aire hasta que aterrizan de manera segura en el coche de Andy. En Nochebuena, ya en la nueva casa, unos reconciliados Buzz y Woody organizan otra misión de reconocimiento, esta vez con el fin de prepararse para la llegada de los juguetes nuevos. Mientras Woody se pregunta si habrá un regalo peor que Buzz, un ladrido se oye del piso de abajo: Andy ha recibido un perro, lo cual deja a Woody y Buzz inquietos.
John Lasseter tuvo su primera experiencia con la animación por ordenador durante su empleo como animador en Disney, cuando dos de sus amigos le mostraron la escena del ciclo de luz de la película Tron (1982). De hecho, tan significativo resultó aquel momento, que comenzó a sentir curiosidad e interés en las posibilidades ofrecidas por el nuevo medio de producción animada (gráficos creados por ordenador).[10] Tiempo después, trabajó en Lucasfilm hasta llegar a ser, finalmente, uno de los fundadores de Pixar.[11] Entre los proyectos que atrajeron la atención de Disney en esa época se hallaban el cortometraje ganador del Óscar, y producido por Pixar, Tin Toy (que a su vez había sido dirigido por Lasseter), así como el compilatorio denominado Computer Animation Production System.[b] Tras una serie de encuentros con Jeffrey Katzenberg en 1990, Pixar estrenó un especial televisivo llamado A Tin Toy Christmas. En julio de ese mismo año, Disney y Pixar firmaron un acuerdo para colaborar en una cinta que habría de basarse en los personajes de Tin Toy, llevando como título Toy Story.[12] El contrato incluía la producción de tres largometrajes (siendo Toy Story el primero), así como un 10% de las ganancias para Pixar por cada película.[13] [14] Se sabe que las ideas del guionista Robert McKee influyeron notablemente en el guión de Toy Story, el cual pasó por varios cambios antes de llegar a la edición definitiva. El director se percató de que Tinny era «bastante anticuado» como para aparecer en la película, por lo que lo cambió a una figura de acción militar, cuyo entorno habría de ser el espacio exterior. Asimismo, el nombre del personaje pasó a ser Lunar Larry, para después llamarse Morph Lightyear; al final, quedó como Buzz, a manera de tributo al astronauta Buzz Aldrin.[15] Su diseño se creó basándose en los trajes utilizados por los astronautas del programa Apolo, así como en las figuras de acción de G.I. Joe.[16] [17] Un segundo protagonista, al principio concebido como el muñeco de un ventrílocuo, se rediseñó hasta convertirse en un muñeco vaquero con un mecanismo de audio que se activaba al tirar de una cuerda; su nombre, Woody, proviene del actor de western Woody Strode. Así, las diferencias entre la innovación y lo clásico de ambos juguetes provocarían una rivalidad en cuanto a sus personalidades.[15] Adicionalmente, Lasseter no quería que la película fuera un musical, sino más bien una «cinta de amigos», por lo que el departamento encargado de crear la trama se inspiró en filmes como Límite: 48 horas y Fugitivos.[15] A su vez, Joss Whedon dijo al respecto: «Sería un musical muy malo, pues está concebida como una cinta de amigos. Es sobre personas que no admitirán lo que quieren, por lo que menos lo querrán cantar. [...] Las películas de este género son sobre rivalidad, 'Te odio'. No sobre emociones claras».[6] Disney también contrató a Joel Cohen y a Alec Sokolow (junto a Whedon) para contribuir en el desarrollo del relato.[15] Cabe señalar que dichos estudios querían que la cinta fuera familiar; esto es, dirigida a públicos tanto infantiles como adultos, por lo que buscó que Pixar añadiera algunas referencias más maduras en Toy Story.[6] Finalmente, el 19 de enero de 1993, dio luz verde de manera oficial al proyecto, con lo que se inició el proceso de casting para elegir a los actores de voz.[6] Respecto a los actores, desde un inicio, Lasseter quiso que Tom Hanks interpretara a Woody, diciendo: «[... él] tiene la capacidad para adoptar sensaciones y volverlas conmovedoras. Incluso si el personaje, como en el caso de A League of Their Own, se halla en las situaciones más adversas y despreciables».[6] Por otra parte, las primeras sesiones de metraje, con la voz de Hanks a partir de Turner and Hooch, convencieron al actor para que participara en Toy Story.[6] [18] Billy Crystal resultó elegido para interpretar a Buzz, pero rechazó el papel, lo que después lamentaría, aunque más tarde, dio voz a Mike Wazowski en la producción de Pixar, Monsters, Inc.[19] [20] Debido a ello, Katzenberg le ofreció el rol a Tim Allen, quien se encontraba trabajando para entonces en la serie Home Improvement, de Disney.[15] Asimismo, Toy Story se convirtió en el primer papel de un personaje animado para ambos actores.[21] Pixar presentó un boceto inicial de la película a Disney el 19 de noviembre de 1993.[6] Sin embargo, el resultado fue un completo desastre: el entonces presidente de la filial Walt Disney Feature Animation, Peter Schneider, optó por pausar de manera inmediata la producción bajo la condición de que se redactara un nuevo guión. Pixar sobrevivió a esta situación sólo porque recurrió al mercado televisivo mientras el guión era repasado de nuevo.[6] Una vez acabado, el escrito volvió a Woody un personaje más simpático, en vez del «pelmazo sarcástico» que era originalmente. Así, la producción se reinició, por obra de Katzenberg, en febrero del año siguiente.[15] De igual manera, el reparto que prestó sus voces para el anterior metraje regresó íntegro en marzo, con el objetivo de grabar sus nuevas líneas.[6] Cabe señalarse que Whedon concibió originalmente incorporar a la muñeca Barbie en la escena final de la película, donde habría de rescatar a Woody y Buzz.[22] Sin embargo, su idea fue rechazada después de que Mattel rehusara conceder la licencia del juguete. Al respecto, el productor Ralph Guggenheim señaló que la empresa no había permitido el uso de dicha muñeca, debido a que «piensan [Mattel] filosóficamente que las niñas que juegan con las muñecas Barbie están proyectando sus personalidades en éstas. Si le pones voz y animas a la muñeca, entonces estás creando una persona que tal vez no vaya acorde a los sueños y aspiraciones de cada niña».[6] A pesar de ello, las muñecas aparecieron en la continuación de la cinta, Toy Story 2. De manera semejante a lo acontecido con Barbie, Mattel se negó a conceder la licencia de las figuras de acción de G.I. Joe, no obstante sí permitió que se incorporara a Mr. Potato Head.[6] [15] Los juguetes que aparecen en Toy Story fueron producidos por Thinkway Toys, compañía que obtuvo la licencia para fabricarlos a nivel mundial en 1995.[23]
Toy Story se completó con un presupuesto de 30 millones de dólares y utilizando un equipo conformado por 110 empleados,[5] a diferencia de una de las últimas producciones de Disney en aquellos años, El rey león (1994), que requirió un presupuesto de 45 millones de dólares y un personal de 800 personas.[6] El director habló sobre los desafíos que implicó la animación por ordenador en la película: «Tuvimos que hacer que todas las cosas lucieran más orgánicas. Cada hoja de césped tuvo que ser creada desde cero. Asimismo, nos dimos a la tarea de darle a ese universo un sentido de realismo. Por lo tanto, las puertas se hallan golpeadas y los pisos lucen desgastados».[6] La película comenzó a partir de una serie de guiones gráficos animados, los cuales sirvieron de guía para los animadores que se dedicaban a desarrollar cada personaje. Respecto a cifras, un total de 27 animadores trabajaron en la producción de Toy Story, usando hasta 400 modelos computacionales con los que lograron animar a los personajes; cada uno de estos últimos primeramente fue modelado en arcilla, o en su defecto creado a partir de un diagrama computarizado, antes de que se concretara el diseño animado final. Una vez que los empleados tenían el modelo listo, la siguiente tarea consistió en codificar los controles de articulación y movimiento —que, en su conjunto, garantizaron el movimiento de cada personaje en una amplia variedad de formas, tales como hablar, caminar o saltar—.[25] De toda la galería de personajes, Woody resultó ser el más complejo, pues requirió hasta 723 controles de movimiento, incluyendo 212 para su rostro y 58 adicionales para su boca.[6] [26] Para sincronizar las voces de los actores con las bocas de los personajes, los animadores pasaron una semana concretando los detalles de las bocas y las expresiones de cada personaje.[25] Tras esto, la siguiente etapa consistió en compilar todas las escenas y desarrollar un nuevo guión gráfico, esta vez incorporando a los personajes ya animados por ordenador. En este mismo proceso, se añadieron el sombreado, los juegos de luces y otros efectos visuales que se pueden observar en la película, para finalmente utilizar 300 procesadores computacionales con el objetivo de darle el diseño final a Toy Story.[25] [26] Durante la etapa de posproducción, se envió el metraje final a Skywalker Sound, donde se mezclaron los efectos de sonido con la banda sonora.[26] Así, en total se dedicaron 800.000 horas máquina[c] y 114.240 fotogramas animados, cada uno requiriendo de dos a quince horas en promedio para su culminación.[5] [6] [25]